Venía yo pensando en lo que iba a escribir hoy, que había sacado un montón de fotos el otro día y tal, y de repente se escucha un truenillo. Como ya me conozco cómo se las cascan las nubes de aquí, agarro la bolsa de Karate con las dos manos y empiezo a andar como un bastante más rápidillo. Como si lo viera! se ha puesto a llover estilo Tokyo: pa todos los lados y mucho!!!! jode, es como si coges el mar y le das la vuelta encima de un colador, que calada llevo encima!!!! Y lo peor es la ropa, que está ahí chorreando y mirándome mal como queriendo decir: «a ver si te compras un paragüas de una chunta vez!»…
El trueno me ha recordado al que se escucha en la canción de Sorotan Bele, Zortzi Orduko Ekaitza (Una tormenta de ocho horas), bonita canción, si señor.
Ba, pero a un txirimiriero como yo no le va a achantar una tormentucha de nada (jodé la que está cayendo). Así que paso a lo que os iba a contar, que es
Mucha gente me ha preguntado que qué hago aquí, que por qué me he venido. Y yo siempre decía que si un proyecto web, que si trabajar, karate, japonés…. ¡¡mentira!!. Yo he vuelto porque había una cosa sin la que no he sabido vivir durante todo este tiempo.
No tienen absolutamente nada que ver con los que te puedes encontrar por allí. Podríamos decir que hay como cuatro veces más cosas, y que la mayoría son de primerísima calidad, que ahora mismo cien yenes son cien pesetas (aprovechad para venir que no habrá otra como esta!), y que estamos adaptados a Japón. Esto último viene a decir que si en Bilbao puedes comprar ceniceros con el escudo del Athletic de Bilbao pintao a mano en China, aquí puedes comprar cuencos, vajilla japonesa, palillos, pinceles para caligrafía, té… ¡y por veinte duritos, que diría Pedro Reyes!
Por cierto, que me estoy jugando la vida por vosotros, eh?, no hago más que delinquir. Se supone que no se pueden sacar fotos en estos sitios, pero yo que pongo mi cara de hacer la primera comunión y de no entender ni jota de japonés, le echo un par de webs para hacer la web. Que se valore esto!
Aunque le aplican no se que IVA y te vale 105, pero vamos, que aún así te puedes encontrar cosas super chulas por veinticinco durillos. Por orden, a mi las secciones que más me gustan son:1- vajillas, cuencos, etc., 2-bolis, postits, etc. y 3-cosas de putxiglas, de plastiquillo como los tapers, que tienen desde cajones hasta mesas (lo juro por la gomina de songoku).
Y tenemos comida!!!! Todo buenas marcas, vamos, que esto mismo te lo encuentras en el supermercao de al lado de casa. Así que ya os podéis imaginar que cada vez que hago yo una excursión aquí, pierdo trece kilos camino a casa de todo el peso que llevo encima! Aunque luego lo vuelvo a ganar zampándome los doritos que traigo, peeero, eso es otro tema!
Udón o fideos finos japoneses. Por cierto, que se comen fríos y están super buenos.
Algas para sushi. Eh! esto está bueno también una vez que te acostumbras!
Sembei, las galletas saladas japonesas. Están buenas también!! (¿me estoy volviendo mu raro?)
Buaa, yo he acabado de escribir (tengo unas ganas de volver al todo a cien que no meo en tres días!), y sigue lloviendo, menudos truenos!! Es curioso las tormentonas que se tiran aquí y nunca se va la luz…
Bueno señores, hasta mañanita! Aio!
