Hubo muchos tipos de momentos antes del primer día de la escuela de Kota pero los peores vinieron después de la primera semana; y es que se entendió pronto que la escuela no es la guardería pero en otro lado y, hostia, resulta que de repente hay un pupitre del que uno no se puede levantar a destiempo y profesores que son más profesores todavía y deberes y horarios y normas, muchas normas.
Las mañanas, otrora plácidas cual aguas de piscina por abrir, se convirtieron de repente en el Mar Menor con ventisca. ¿Tu sabes de eso que te levantas habiendo dormido mal? En esos días debería estar legislado poder estar de mala hostia durante al menos un par de horas. Vamos, que si alguien te toca la huevada de 6 a 8, poder echarle un grito con la constitución en la mano sin repercusiones legales ni maritales. Bueno, pues añádele a ese estado encabronil a un chaval de 6 años quemando todos los cartuchos para no ir a la escuela desde primera legaña: empezando por fingir dolores de cabeza (o estómago según sea jueves o martes), hasta enfados, refunfunamientos y pejiguerías varias acabando, casi siempre, llorando agarrado a la pierna adulta más cercana implorando clemencia.
Joder, ni que fuese el de 1917 con la carta.
Además es que a la escuela tiene que ir solo porque no se nos permite a los padres que le acompañemos. Es parte de la movida cultural de aquí y a mí me parece bastante bien porque así espabila y además hay un montón de jubilados a esas horas al loro de que no pase nada, sobretodo en los pasos de cebra. También se turnan los padres para estar con la banderita, así que cuando me toque, ya haré informe de las caras de los chavales cuando vean a un Zalluco ahí gritándoles «¡¡¡cuidao coño!!!».
El caso es que las vueltas tampoco eran muy allá: la hora y media echapestil con sus «gakko kirai» y «gakko yada» no nos la ahorraba ni media docena de choco tamagos de Doraemon dados como ofrenda.
La hostia, qué drama todo. Y espérate a cuando toca ponerle a hacer los deberes. Sálvame deluxe.
Por ponerle contexto al asunto, dejadme contar que nos mudamos hará algo más de medio año. Es una especie de urbanización donde hay diversas casas unifamiliares, todas diferentes pero del mismo estilo y nosotros fuimos los primeros en llegar. Estuvimos solos tres meses y poco a poco se han ido vendiendo las casas de alrededor. La primera familia que vino tenía una hija de tres años menor que Kota, la siguiente vino con dos chavales pero también de edades diferentes por lo alto y por lo bajo. A la tercera vino la vencida y es que la hija tiene la misma edad que el Toscaner semijaponés que anida en mi refugio y resulta que han hecho buenas migas. Hemos, diría, porque nos llevamos bien con los padres y no es raro el día en que los críos se juntan en nuestra o en su casa para echar la tarde dando gritos.
Sabiendo del remolonamiento de Kota a las mañanas y viendo que su hija no tenía ni medio problema (pa que luego digan del sexo débil), decidió venir a buscarle para ir juntos. Así que a eso de las ocho, suena el timbre y el Kota sale ya con una sonrisa en la cara escopeteado por la puerta para ir con su nueva amiga encantado al cole. Además es que el cabrón se hace el chulito delante de ella… resultado: se acabaron los lloros y las mierdas mañaneras. Yo casi me santiguo cuando la veo venir por la ventana. Cásate con él, por Dios.
Pero al ir a clases diferentes, raro es que a la vuelta coincidan. Yo como curro desde casa, solía salir a la puerta de la calle a esperarle y ayudarle con la mochila, porque menudo mamotreto me lleva, que esa es otra, y así también intentar que no venga tan vinagres de la escuela; a ver si al saber que estoy ahí esperándole le animase un poquejo la vuelta…
Al de unos días, y en lo que estoy regando las plantas, escucho: «ese es mi padre, es español». Y veo que Kota viene con un amigo y está todo orgullo de presentarme (algún día habrá que hablar con él seriamente sobre esa presentación). Pasada la sorpresa inicial, le empieza a enseñar al nuevo colega la casa por fuera, la bici, el patinete… pasando de mi y de mi cuarentón culo.
– ¿Kota, hoy has venido con un amigo?, le pregunto, ¿cómo se llama?
– Ni idea, yo le llamo «Chibiko chan» (chibiko significa algo así como «enano»)
– Pero no le llames eso, hombre
– Na, si él se ríe, no le importa
– Bueno, pero no se lo llames, entérate de como se llama
Hoy Kota ya no vuelve solo prácticamente nunca. De hecho, ha enseñado a su «padre extranjero» ya a media escuela, solo les falta echarme cacahuetes y decirme «sit sit». Yo a veces ya ni salgo. Raro es el día que no aparece con cuatro o cinco chavales y se tiran un rato dando voces ahí en la puerta de casa. Y yo que me alegro, ojo.
Ayer, un buen rato después de la hora de volver de clase, llamaron a la puerta. Era Chibiko chan, o Kohei kun como se llama de verdad. Que no le abren en su casa, que llueve y hace frío y no sabe qué hacer y se le ocurrió venir donde «Diaz san». «Hostias, claro, entra, sube que Kota está arriba!!».
Y a Kota se le iluminó la cara. ¿Que formaron el apocalipsis en el rato que tardó la madre en venir a buscarle? efectivamente, el-pu-to-a-po-ca-lip-sis: todavía estoy buscando el mando de la Switch, a saber donde coño lo metieron.
¿Que Kota se ha echado colegas y va y viene todo contento de la escuela?.
Si.
¿Que se hace mayor? ¿que empieza a pasar de mi culo?
También.
Me parto con el apodo y la explicación de Kota al respecto.
Que vaya teniendo amigos es normal. Ley de vida! Lo importante es que esté contento.
Y CAPACHAO con el aspecto del blog? Pusiste en twitter que cascó por una actualización, pero no se puede hacer rollback de alguna manera?
Un brazo!
Marcho
Gracias, muchachuelo!
Lo del theme, pues es que no sé si tengo muchas ganas de andar ahí poniendo la movida otra vez… me acuerdo que tardé un huevo en hacerlo y luego hay que andar actualizándolo según vayan cambiando las versiones de los plugins y de WordPress… es un currelo. De momento dejo este que aunque es mucho más soso, a mi mientras se puedan leer los posts, me vale
Genial historia… que duros son los comienzos, y que alegría se lleva uno cuando se van encaminado…
Un saludo.
Eh, pero es que menudos dramas, ¿eh? jajaja
¡Qué maravilla leerte! Me ha encantado la historia y la ternura con la que lo cuentas. Esas primeras amistades son un tesoro y espero que le acompañen a Kota durante muchísimos años <3
Feliz día y gracias por abrirnos (de vez en cuando) esta pequeña ventana a tu mundo
Yo al menos guardo muy buen recuerdo de mis compañeros de escuela. Del instituto ya no tanto, pero lo de la escuela los recuerdo con mucho cariño. Igual al ser todos del pueblo… no sé.
Ojalá Kota haga muchos amigos!
Qué raro el aspecto del blog, ¡pero qué alegría su vuelta!
El tiempo pasa, seguro que en un par de días te replicará y te dirá que no sabes nada
Pues de momento así se queda, no tengo ganas de andar trasteando para que luego se rompa de repente todo!!
Mientras se pueda seguir leyendo, así va!
Jo… los siglos que no te leía… y años sin comentar.
Sigues siendo un tipo que cuenta las cosas de tal manera que dan ganas de abrazar a la pantalla.
Qué país… qué vivencias… qué desgraciaos se van volviendo los críos conforme pasan los años… .
Un saludo gordo!!
Hombre, tampoco es que haya escrito yo nada todo este tiempo, jajaja
Abrazaco!
Que mayor se van haciendo.
Parece que el reclamo de tener un padre español le ayuda para hacer amigos. El día que te pida organizar «una fiesta española» para fardar delante de los amigos vas a flipar.
Muy grande la vecina, varía visto el cielo con ella, jajaja!
Un placer leerte de nuevo.
Pues dentro de ná es su cumpleaños, seguro que tenemos juerga montada….
Gran noticia ! El Tío Tosca publíca de nuevo !
Siempre es un placer leer, algo más que un mensaje corto en twitter. Es una pena que se esten perdiendo los blog.
Sumar la resistencia a los cambios, a la situación actual sanitaria, no debe ser nada facil; incluso para el gran Kota. Pero parece que las cosas van a mejor y ahora la adaptación es para el padre, que se hacen mayores y no siempre es facil de asumir.
La responsabilidad y el espabilar se entrena desde pequeños, y en eso no hay duda que vais muchos años por delante, y se nota. Lo de prohibir que les acompañen los padres al cole, aquí sería hoy por hoy, totalmente impensable.
Un gran saludo !!
A ver si voy sacando tiempo para publicar algo aunque sea un día a la semana!
Kota la putada es esa que prácticamente no salimos de casa durante los fines de semana y entre semana le toca ir a la escuela con deberes incluidos. Yo intento hacer cosas con él pero andamos muy limitados por la dichosa pandemia (bueno, aquí las cosas están bastante bien pero yo no me fío un pelo y prefiero seguir precavido unos meses hasta que escampe que arrepentirme después).
Se va haciendo mayor, si. Pero bueno, también está June, así que entre uno y otro…
Que bonita y entretenida historia! Casi que puedo tomar ideas para cuando tenga un churumbel y me sea remolón!
Como siempre, un gusto leerte!
Un abrazo!
Okaeri Toscano-san. Un gustico volver a leerte! se te echaba de menos.
Los pelos de punta casi como siempre, ¡un gustazo volver a leerte!
Al fin vuelves a contarte algo por aquí, que bien!!!
Lo de Kota y el cole, creo que nos pasó a todos, hasta que no te echas algún amiguete el infierno.
Ma molao la historia, a ver si con eso del cole y los deberes te da más material y nos cuentas más cosas que te ha salido el churumbel con mucho desparpajo y seguro que salen batallitas buenas.
A cuidarse!!!
El chaval se nos hace mayor!
Un saludo
Por una parte bien porque así nos deja más tiempo para nosotros, que falta nos hace. Pero por otra…
Qué bien que has vuelto!! Me alegro de leerte. Esperamos impacientes el siguiente post!!
Me alegro de volver a leer tus historias, y me alegro también de que Kota se haya acostumbrado a la escuela.
Un abrazo desde Okinawa. Cuídense mucho.
Comentario de señora mayor, vale? Si es que fue ayer que te veia sentado en el sofá con Chiaki diciendo que estaban embarazados! Y ahora mira♀️ que mayores se hacen y lo que vuela el tiempo!
Pero y lo que molaaaa tener esa edad y hacerte colegas y pasartela en grande sin pensar en naaaa!
Los niños nos dan millones de vueltas en relaciones sociales
Yo también tenia padres extranjeros y eso molaaa mucho a veces jajaja
Me ha encantado volver a leerte! Gracias!!!!
Uyyy se me ha metido un símbolo en el texto jajaja si soy sra mayor en serio jajaja
Un placer volver a leerte
Parece ayer cuando nos enseñaste la primera foto de Kota, y lo grande que está ya!
Un saludo, y deseando que venga el siguiente post
Que alegría leerte de nuevo killo! Yo aún no he empezado la etapa del hoikuen con Simón pero ya llegará. A ver si un día de adeveras nos ponemos de acuerdo y nos vemos cojones, que llevamos 3 años para ello jaja.
un abrizo toscaner
Que sepas que aún recuerdo aquella conversación que tuvimos el día del parto jaja. La tengo que tener aún por ahí en Facebook. No veas cómo corre el tiempo! Tira millas!
Se me ha iluminado el alma al ver un post nuevo. Y me ha gustado como el que más. Encantadísimo con que hayas vuelto a postear. Felicidades por tener uno hijo tan sanote y alegre!
Un placer volver a leerte.