En mi barrio hay un Kitamura, que es como decir que un Eroski pero con nombre autóctononativo. El amigo Kita tiene que estar forrao, porque a parte del súper, tiene una inmobiliaria enfrente, y una tienda enoooorme con de todo al otro lado. Y viendo el dineral que me estoy gastando yo a costa de Ikusuki Investigación, seguro que abre un kiosko dentro de poco a mi costa! (comprad camisetas, que se me acaba el presupuestoooo!!!)
En fin, que ayer comprando en el Kita #1 una barra de pan para zamparme un paquetillo de salchichón que me mandó Bea (Empates! Bea-Maper-Mis padres 3, Perros del aeropuerto 3), cuando me encuentro con una cerveza para niños. Si tenemos en cuenta que es la bebida alcoholica que más se pimpla aquí con diferencia, es una buena idea para que los niños no tengan envidia!
Por supuesto, sin alcohol. Pero tiene su espumilla, y su color igual igual que una cerveza normal!
Los niños pueden ver la espumilla, brindar… sentirse mayores por un rato!. Aunque el sabor era a kas de limón!!!
Anda que a mí me valía con un:
«hija quieres probar?, prueba prueba»
sorbito después:
«buag, apa, que asco…., buag…»
y así hasta que ya me hice mayor, y no sé porque leches cuando eres mayor te gusta la cerveza.
Esto me recuerda a las cajetillas que vendían con cigarrillos de chocolate. Las había de todas las marcas de lo que fumaban los mayores. Ya están prohibidas porque incitaban a los niños a fumar.
Me supongo que en unos años esta cerveza igual la prohiben también en el país del sol.
Pobrecitos los niños… que no les engañen y que les den cerveza de verdad, no de palo…
Una cerveza sin resaca es como un partido de futbol sin pelota… correr para nada…
Santa razón Lupin III… Almu tambien, con la edad te gusta la cerveza aunque al principio te sabe amarga.
Por aquí hace unos años que, sobre todo por Navidades, se ve champán para niños en algunas tiendas, aunque aún no me he aventurado a probarlo y no sé si lo haré, porque muy amiga de las bebidas con gas no soy, y tiene toda la pinta de tener…