Julio ha molado mucho; empezó a hacer calorcico del bueno y yo me empecé a dar paseícos a los mediodías. Bueno, paseacos, me instalé una aplicación en el móvil de esas que te miden los pasos y me piqué con un grupo de amigos a ver quien andaba más, así que a los mediodías me hacía unos cuatro kilómetros. Hasta me traía ropa para cambiarme la sudada y todo antes de volver a la ofi.
Dentro fotos de los ohirupaseos!
Luego había un tal Take que el cabrón me seguía sacando dos mil pasos, así que empecé a darme los paseos a la noche al salir de la ofi y antes de coger la bici para volver a casa. Mwahaha, le gané.
Dentro fotos de los yorupaseos!
Por cierto, ojo al nombre de esta elementa!!:
En España estuve mirando las cosas de mi padre y me encontré un billete de cinco pesetas de la segunda república, flipa:
Y alguna curiosidad más como las cintas que todavía tiene mi hermano Javi o el juguete de Doraemon que se le antojó a Kota. Tela lo de comprar un juguete de Doraemon a mi hijo japonés en un centro comercial de Badajoz!
Y esta es una de las cestas que hacía mi padre a mano, incluso le encargaron alguna de una tienda que quería usarlas para exponer en el escaparate sus productos. Ya la tengo puesta en un lugar privilegiado del salón:
Por cierto, que durante el viaje usé un cacharro wifi portátil de WifiAway, que me lo mandaron a la habitación del hotel y dejé en un buzón en el aeropuerto. Funcionó perfectamente, tenía hasta 20Gb con lo que Kota pudo ver sus movidas de Youtube en el iPad camino de Badajoz, por ejemplo, y sobretodo poder usar Google Maps para ir a los sitios es impagable!
Nada más llegar a Narita, me encuentro a la televisión haciéndole una entrevista a una compañera mía de trabajo que volvía de Londres de viaje. Jajaja, menuda pájara, anda que no le gustan estas movidas!! se descojonaba luego cuando le mandé la foto con la reportera, porque no se dio cuenta que estaba yo al quite!
Y ojo al alijo que nos trajimos! Esta vez ni embutidos ni hostias porque resulta que en el súper de mi barrio venden de todo, así que el alijo es más indie que otro poco:
¡Ay las cremicas! ¡ay las cremicas! tengo yo más que Chiaki!
Después, pues bueno: vuelta a la rutina bici paquí, rascatecleo pallá. Oye! dos semanas sin coger la bici y joder, agujetas!
Le compré también una piscina a Kota aunque creo que me lo paso yo mejor que él, jajaja, que tunantes estamos hechos.
También me compré un quintal de libros para el examen de japonés, que sigo estudiando, ¿eh?, hay que sacarse el N2. Tengo un plan, pero ya os lo contaré, mwahahaha:
Y quedamos con una amiga de Chiaki que, curioso, tiene su misma edad, su marido la misma edad que yo, y su hijo la misma que Kota. El caso es que había matsuri en mi barrio, aunque no salió muy allá porque Kota se quedó sobao y a Shushu-kun le dio fiebre… con críos ya se sabe, pero nos dio tiempo a zampar una chocobanana maqueada, el I+D japonés, amigos!
Hostia, que a pocas se me olvida!! eh chatos!! que me han dado el visado permanente!!! a tomar por culo inmigración y toda esa mierda de papeleo!!! yeha!!!! llamadme Takeshi Toscano!! alfombra roja en los pachinkos ya!!
Y justo ayer resulta que me encontré una sandiaca de 74Kg ahí expuesta, fíjate: si antes digo que las frutas y verduras en Japón son ridículas… el zasca lo ha escuchado hasta Putin!
También me llegó a la noche un reloj marcamierder que pedí por Amazón, es de estos con pulsómetro que quería para correr, lo he usado hoy y va de sobra para lo que yo quiero (probablemente me acabe comprando el Apple Watch cuando salga el nuevo, pero esto no se lo contéis a Chiaki )
La última novedad es que parece que se estabiliza un poco la situación de mi empresa, que llevábamos con la web y la app chapadas desde octubre del año pasado por unas movidas legales de copyrights. Justo ayer anunciaron que se crea una empresa nueva, nos mueven ahí y volvemos a sacar el invento. Lo único malo es que le decimos adios a Shibuya, que es un sitio que me mola mucho para currar, además la ofi de ahora tiene unas vistas de la hostia:
Pero bueno, a todo se hace uno, la nueva oficina está en Jimbocho, a cinco kilómetros más en bici, serían ya 17km ida + 17km vuelta… a ver si pudiera ser que no hubiese muchas cuestas… (el tren no es una opción!!)
¡Buen fin de semana, muchachos!