Uno nunca sabe que va a pasar. Yo podría decir que este año he aprendido más que ningún otro de mi vida, que la realidad supera cualquier ficción o imaginación. Ha sido un año de sustos, alegrías, emociones y finalmente cambios, un año en el que he aprendido tanto… pero tanto…
Al estilo de Héctor, voy a tratar de elegir las fotos que quizás resumen los momentos más relevantes de los últimos doce meses. Sé que no están todos, pero si que será una recopilación muy representativa de lo vivido. Esta vez si que me voy a centrar en la calidad de las imágenes, vamos a ello:
Diciembre empezó celebrando la noticia de que Guille había conseguido el cinturón negro de Kendo, que yo sepa a estas alturas ya va por el segundo dan.
En Enero nos fuimos a Nikko de excursión, de los primeros viajes que hacíamos juntos la señora de Toscano y yo. Alquilamos un coche y nos fuimos a un parque donde había maquetas de las maravillas del mundo, estaban muy muy conseguidas!
En Febrero recibí el diploma del segundo dan de Karate de manos de Suzuki Sensei, firmado por Kanazawa Kancho. El examen fue el día de Navidad y creo que es el mejor que había hecho nunca. Al llegar a casa y abrirlo sobre el tatami, me deshice en lágrimas.
Marzo, el mes del terremoto, del tsunami con miles de víctimas directas, la crisis nuclear de Fukushima, la incertidumbre de los que vivíamos relativamente cerca, los cortes de luz.
Abril fue el mes en que florecieron, seguro que con más fuerza y belleza que otros años, los cerezos. Los corazones se nos tornaron algunos tonos más blancos a la par, como si empezásemos a reconciliarnos de nuevo con el planeta.
En Mayo me volví a Zalla después de dos años seguidos en Tokyo, me olvidé de un tirón de terremotos, radiaciones, accidentes de moto y pasé semana y pico con los míos. Volví pero no lo hice solo, y los días fueron mágicos.
Del mes de las lluvias, Junio, no tengo ninguna foto que merezca la pena aunque si que hice alguna que otra excursión cuando el tiempo me dejó. Eso sí, ninguna como la de Nokogiriyama que hicimos en Julio. Si vas con amigos a sitios así, raro será no seguir acordándose durante muchos años de los momentos vividos.
También mi cuenta de Flickr empezó a tener más movimiento, vete a saber porqué, y eligieron algunas fotos para venderlas en Getty Images. Lo cierto es que aunque han elegido bastantes más después de aquello, no se ha vendido ninguna, así que no tengo claro que sirva para algo. De todas maneras, me gustó mucho que una de las seleccionadas fuese la de mi padre llevando a mi sobrina, a mi me encanta por motivos obvios, pero también por la diferencia de color de pelo de los dos… aiss…
En agosto pasó de todo: asistí a un funeral, nos fuimos a Hakone, me presenté al nacional de Karate en el estadio olímpico de Yoyogi, nos fuimos a Yamanashi y finalmente todos juntos acabamos en un pueblo abandonado llamado Nichitsu donde pasamos un día imposible de olvidar. Muchas veces digo que yo en verano vivo el doble, ahora que es invierno y estoy enratonado delante del ordenador, lo confirmo.
En septiembre hicimos la segunda clase de cocina española para japoneses, nos fuimos al béisbol y poco más bloguerilmente hablando. Lo cierto es que fue un mes muy especial donde celebramos mi cumpleaños, pero me guardo muchas cosas para mí. No os enfadeis conmigo hombre que aunque cuento muchas cosas, hay algunas que deben ser solo mías!
En octubre vimos un matsuri en mi querido Honmonji y también nos fuimos a Kyoto; me estoy dando cuenta ahora que este año he hecho más viajes que nunca! eso es bueno, Tosca, eso es bueno. También me enteré que me habían cogido para correr la maratón, se anunció la tregua de ETA y se murió Steve Jobs…
Fotográficamente hablando, noviembre empezó con el Halloween donde mis colegas se disfrazaron todos de Zombies y quedaron geniales. Por culpa de la maratón y los entrenamientos que me dejan cansadísimo, me estoy privando de muchas cosas este año… por eso digo que una y no más, Santo Tomás!! También me di cuenta que el entrenamiento de la maratón empezó a dar sus frutos, gané algún combate de Karate en una competición y pasó el incidente con mi ex-jefe que me ha llevado a cambiar de curro.
Diciembre todavía no ha acabado, así que no tiene demasiado sentido resumir lo que ha pasado porque está pasando todavía.
Lo que si que me he dado cuenta es que por alguna razón ya no publico tantas fotos en el blog como lo hacía antes aunque si que he ido sacando algunas que me gustan especialmente y que he ido subiendo a Flickr día si día también. Permitidme que ponga aquí las últimas, estén publicadas o no, y ya cerramos el año como debe ser:
Ah, si, todas las fotos, absolutamente todas han sido tratadas. Sigo sin creer que sea algo malo!!.